Frases célebres e inspiradoras, ideas fundamentales, reflexiones y opiniones de Louis Pasteur
Louis Pasteur (Dole, 27 de diciembre de 1822-Marnes‑la‑Coquette, 28 de septiembre de 1895) fue un químico y microbiólogo francés, miembro de la Academia Francesa (desde 1881; sillón n.º 17). Demostrando la naturaleza microbiológica de la fermentación y de muchas enfermedades de animales y humanos, Pasteur se convirtió en uno de los fundadores de la microbiología y el creador de la base científica para la vacunación y las vacunas contra el carbunco, el cólera aviar y la rabia. Sus trabajos en el campo de la estructura cristalina y el fenómeno de la polarización sentaron las bases de la estereoquímica. Pasteur también puso fin al debate secular sobre la generación espontánea de algunas formas de vida, demostrando experimentalmente su imposibilidad. Su nombre es ampliamente conocido gracias a la tecnología de la pasteurización, que él creó y que más tarde fue bautizada en su honor.
Procedía de una familia de curtidores y recibió una educación variada, que incluía dotes artísticas. Pasteur eligió una carrera científica y se convirtió en profesor de física a los 26 años gracias a su descubrimiento de la estructura de los cristales de ácido tartárico. Pasó algún tiempo trabajando en el Liceo de Dijon y en la Universidad de Estrasburgo, y durante tres años fue decano de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Lille. De 1859 a 1867, fue uno de los líderes de la Escuela Normal Superior. Tras los disturbios estudiantiles, se dedicó plenamente a la investigación y, de 1867 a 1888, dirigió el laboratorio de química fisiológica. Entre 1859 y 1864, Pasteur se centró en el estudio de la teoría de la generación espontánea de microorganismos y simultáneamente se ocupó de los procesos de fermentación en relación con el deterioro masivo del vino y la cerveza durante su preparación y transporte. A partir de 1865, Louis Pasteur comenzó a estudiar las causas de la epidemia de gusanos de seda en el sur de Francia, que causó importantes daños a la sericicultura. A partir de la década de 1870, Pasteur se dedicó casi por completo a los problemas médicos (desde 1873 era miembro de la Academia Nacional de Medicina) debido a una tragedia personal: tres de sus hijos murieron de fiebre tifoidea. En 1868, la Universidad de Bonn concedió a Pasteur el doctorado honoris causa en Medicina, pero tras la guerra franco-prusiana de 1871, lo rechazó por motivos políticos. En 1888 logró la apertura del Instituto Pasteur de París, del que fue el primer director hasta su muerte. Fue enterrado en la cripta del instituto.