El amor es ese grito que ahoga la llama y le hace comprender que es hora de cambiar.

Sean éstas mis últimas palabras: confio en tu amor.

Por una mirada, un mundo; por una sonrisa, un cielo; por un beso… ¡yo no sé qué te daría por un beso!

Cuando se habla de estar enamorado como un loco se exagera; en general, se está enamorado como un tonto.

Tan cierto como que la luz viene del cielo y las palabras de nuestro aliento, como la razón es verdad y la verdad virtud, estoy enlazada a este hombre por lazos tan fuertes como las palabras pueden darlos a los juramentos.
Mariana

Amar es tiempo perdido, si no se es correspondido.

Hay quienes piensan que dejan de enamorarse cuando envejecen, sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse.

No creía que volvería a escribirte, pero acabo de hacerlo. Tengo que ser sincera, porque así soy yo.

No estoy tan enamorado de mis propias opiniones que ignore lo que los demás puedan pensar acerca de ellas.

Gracias a una mirada, un sueño, un recuerdo o un sentimiento podemos llegar a reconocer a un alma gemela.

Él o ella nos cogen de la mano por primera vez y el recuerdo de ese contacto trasciende el tiempo y sacude cada uno de los átomos de nuestro ser.

El amor es locura, es el corazón que late a dos mil por hora, la luz que surge de noche en pleno atardecer, las ganas de despertarse por la mañana sólo para mirarse a los ojos.

Si puedo decir a otra persona “te amo”, debo estar en condiciones de decir “amo a todo el mundo en ti, amo al mundo a través de ti, en ti también me amo a mí mismo”.
– Cita del libro “El arte de amar” de Erich Fromm

La verdadera esencia del romanticismo es la incertidumbre. Si alguna vez me caso, haré todo lo posible por olvidar el suceso

Si no recuerdas la más ligera locura en que el amor te hizo caer, no has amado.